La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo se deslindó de la determinación de Morena, de aceptar como militante al exsenador panista, Miguel Ángel Yunes Márquez, a quien se le conoce como “el traidor” del Partido Acción Nacional (PAN) por haber votado a favor de la reforma judicial en el Congreso de la Unión.
Y es que después de que el legislador fue expulsado del partido blanquiazul, se conoció que Morena podría aceptarlo en sus filas y al respecto, la presidenta de México negó que haya habido una negociación y se desmarcó de la determinación de Morena.
“Lo que entiendo es que fue una decisión de ellos y lo que también se ha dicho es que fue para quitarles las carpetas de investigación que llegaron a tener -los Yunes-“ y aclaró desde su conferencia matutina de este viernes que “es una decisión de ellos haber votado a favor de la reforma al poder judicial.
“No hubo una negociación, hasta donde yo sé, de que iban a entrar a un partido político y en todo caso es una decisión que tiene que tomar la dirigencia de Morena (…) Pero no es que haya sido, hasta donde yo conozco, una negociación en ese sentido (…) y si entra o no le corresponde a la dirigencia (…) no voy a meterme yo en ese tema”.
Sin embargo, antes de concluir su declaración le envió un mensaje a Morena y dijo que “ nosotros tenemos que cuidar siempre al movimiento de donde venimos”.
