Por Alejandro Durán
Complejo cierre del año enfrenta México, pues la inflación en noviembre creció 1.14 por ciento y con ello, a tasa anual escaló a 7.37 (su mayor nivel en 20 años), por lo que el país transita por una “estanflación leve” (altos precios y bajo crecimiento económico), algo que no ocurría desde la década de los ochenta.
Por lo anterior, aumenta la expectativa de que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), termine este 2021 con un crecimiento acumulado de ocho por ciento anual, es decir, su mayor nivel desde el 4.40 por ciento alcanzado en 2001.
De esta manera, con el 7.37 por ciento de noviembre, la inflación acumuló nueve meses a tasa anual por arriba del rango objetivo de entre dos y cuatro por ciento anual que plantea el Banco de México (BANXICO).
“La inflación de este año -expone Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base-, ha estado consistentemente por arriba del promedio histórico; ajustando la inflación promedio por la inercia que ha mostrado este año, se estima una inflación al cierre de 8.0 por ciento anual; y se espera que durante el primer trimestre de 2022 esté encima de siete por ciento”, explicó.
Cabe mencionar que el incremento de precios que experimenta el país se combina con la pérdida de dinamismo que reporta la recuperación económica del país, pues mientras que a mediados de año el consenso de los analistas proyectaba un rebote de 6.06 por ciento, las nuevas estimaciones apuntan a avance de apenas 5.65 por ciento, luego del descalabro de -0.1 por ciento y de -8.2 en 2019 y 2020, respectivamente.
“México atraviesa por una estanflación leve, es decir la combinación de una alta inflación y un estancamiento económico: no se veía una estanflación en México desde la década de los 80´s”, apuntó la especialista.
Por lo anterior, Jorge Gordillo Arias, director de Estudios Económicos de Ci Banco, considera que se elevaron las posibilidades de que el BANXICO endurezca su política monetaria en los próximos días, al anunciar un incremento en su tasa de interés líder, como parte de sus medidas para revertir la mayor inflación del país en 20 años.
“Crece la especulación de que en la reunión de BANXICO de la próxima semana, la autoridad monetaria anuncie un incremento de mayor magnitud en su tasa de fondeo, de 50 puntos base en lugar de los 25 como ha ocurrido en decisiones previas”, explicó.
¿Que empuja la inflación?
Gabriela Siller, analista de Banco Base, advierte que la alta inflación no es tema exclusivo de México, ya que ocurre principalmente por la desincronización en la economía global causada por la pandemia y que se refleja en las disrupciones en las cadenas de suministro, es decir, existe un sensible desequilibrio entre la oferta y demanda global, tras la reactivación paulatina de actividades productivas.
Y en efecto, por grandes grupos de productos o servicios, resulta que, por ejemplo, el sector de agropecuarios reportó un incremento a tasa anual de 14.36 por ciento durante noviembre, mientras que en el mismo mes de 2019 y 2020 los valores fueron 2.18 y 7.20 por ciento. Y lo mismo en el rubro de energéticos, en donde se reportó un incremento de 15.41 por ciento en noviembre pasado, mientras que en los mismos periodos de dos años previos los números fueron -1.80 y -3.05 por ciento, respectivamente.
De manera particular, resultó que durante el mes pasado, la electricidad, (con un avance mensual de 24.16 por ciento), el jitomate (con un alza de 25.38); tomate verde (71.85); choles frescos (30.66); y el transporte aéreo (-9.67 por ciento): figuraron entre los productos con las mayores alzas en sus precios.
En contraparte, figuraron el gas doméstico (-1.40 por ciento); naranja (-4.42); aguacate (-3.31); zapatos para hombres (-1.66); y televisores (-1.37 por ciento).
